Todos tenemos a la/ al típic@ amig@, prim@, cuñad@, compañer@ que dice querernos mogollón pero nos lo demuestra de una forma extraña:
O vosotros no conocéis a personas que...
Tienen siempre un ''pero'' a todo lo que hagas, y es que suelen hablar de ell@s, de ell@s mismos y de lo que a ell@s les pasa. Y a veces, pienso que más vale que lo hagan, porque cuando hablan sobre tu persona sólo lo hacen para referirse a tu acné, trasero, calvicie, peso, fracaso, problema o cualquier tema que pueda fastidiarte, y en el caso de que demuestres tu descontento se escudan en la broma y la ironía, y en tu falta de sentido del humor. Sí, será éso.Y es que te quieren tanto, tantísimo, que no sólo odian a tus amigos, si no que se han atrevido hasta con tu familia. Eso sí, después son los primeros de la lista para apuntarse a bautizos, fiestas y festejos de cualquier tipo. Son los típicos que critican cualquier cosa que estrenes: vestido, coche, perfume, zapatos, mueble... Ell@s siempre se hubiesen comprado algo mucho mejor. Aunque siempre son los primeros en tratar de heredarlo en el caso de que salga la más mínima oportunidad con un ''Si lo vas a tirar...'' Y aunque una ignore sus llamadas (que además tengo facilidad para hacerlo sin sentirme culpable), sus correos masivos y sus comentarios a terceros, tienen la santa costumbre de aprovechar cualquier despiste para colarse en una cadena de correos en la que no estaban copiados, participar en tu Facebook con cualquier frase desagradable o dejarse caer por el bar que frecuentas como quien pasaba por allí.
Y no sé si por educación, por pereza o por vergüenza ajena terminas por aguantar el chaparrón sin decir nada.
¡No hija, no!
A veces con un ''¡huy! Aunque te es toy mirando fijamente a los ojos hoy no me apetece nada saludarte y por lo tanto voy a hacer como que no te he visto aunque tú sepas que te estoy ignorando y te pongas roj@ de ira'' basta!
A ver si sólo vamos a poder deshacernos de cosas en esta vida, que hay personas que son un lastre, y el lastre está sólo para soltarlo.
Y una vez lo haces te das cuenta que al día siguiente, el sol sigue brillando.
Escrito por Verónica Mar de Bokamanga.com.
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