La historia de la bicicleta y el príncipe azul de cuento

Antes de seguir con los temas de la pre-venta de las novedades de Jordi Labanda... un poco de ironías de la vida.
"La vida es como montar en bicicleta. Si quieres mantener el equilibrio no puedes parar''
Albert Einstein


Durante un verano, aprovechando que era posible llevar la bici en el tren en hora punta, me dediqué a ir al curro en bici cada día. 

En el camino de vuelta, me cruzaba a un chico que iba a correr. Guapo, alto, y con un cuerpo atlético. Al estar en frente el uno del otro siempre me regalaba una hermosa sonrisa. A la que yo correspondía con la mía.

Uno de esos días lo vi venir de lejos, y concentrada en no perderme ni un detalle de mi sonrisa preferida, pedaleé con fuerza. En ese momento la cadena de la bici se salió haciendo que el pedal derecho bajara a toda velocidad con mi pie encima y yo perdiera el equilibrio hacia la derecha. No te caigas, pensé, haz lo que sea pero no te caigas. En lugar de caer, apoyé como pude el pie derecho sobre el suelo a bastante distancia de la bici, viniéndose esta hacia mí, y haciendo elevar mi pierna izquierda en una posición un tanto extraña. Espatarrada, bastante desequilibrada y con la cadena colgando llegó mi sonrisa preferida. Fue justo en ese momento cuando la bici comenzó a caer, y yo continué con la pierna izquierda levantada, como si fuera un perro a punto de hacer pipí. Por favor Vero, no caigas, aguanta el equilibrio, volví a pensar. Comencé a saltar con la pierna derecha, hasta que al fin, toqué suelo con los dos pies, para caerme, sin remedio, de rodillas, al suelo.

- ¿Te has hecho daño?- preguntó él.
- No, tranquilo, dije yo- mientras notaba un dolor agudo en la rodilla derecha.
- ¿Te ayudo?
- No, no es necesario- contesté sin levantarme, aún de rodillas y más colorada que la sangre que descubrí después.

Y se fue. Y yo comencé a reírme, de mi misma, de la situación, y de pensar que las pelis de amor americanas eran de lo más cotidiano, y que una se enamoraba irremediablemente de una sonrisa bonita, mientras hacía equilibrismos con su dignidad.

Verónica          
       
        para El blog de Verónica & Bokamanga.com

¡Compártelo!


Recibe mi blog en tu correo electrónico:

2 comentarios:

¡Hola! No te lo pienses, tus comentarios y opiniones son siempre bien recibidas en mi blog.
¡Gracias!

¿Quieres seguirme a través de Facebook?